Fin de semana de frío intenso, hielo y fuerte oleaje

1. 16.000 escolares se quedan sin clase y 1.000 abonados del Priorat pasan el día sin luz
2. • La nieve cierra 18 carreteras, bloquea un tren en Tarragona y causa retrasos en el AVE

ESTHER CELMA / TARRAGONA
MARÍA JESÚS IBÁÑEZ / BARCELONA

Jaume Martí, el electricista de Falset, no daba ayer abasto. Los cambios de tensión durante todo el día en el pueblo hicieron saltar los diferenciales de los cuadros eléctricos y estropearon electrodomésticos y aparatos electrónicos. La capital del Priorat, donde el suministro se restableció a las 15.00 horas de ayer, fue una de las 10 poblaciones de la comarca a las que el temporal dejó sin luz durante más de 12 horas, con un millar de abonados afectados.
Cortes de luz como el de Falset no fueron lo único que sucedió en un complicado segundo día de temporal de frío polar en Catalunya. La jornada deparó trenes atrapados o retrasados por la nieve, casi un centenar de carreteras afectadas en algún momento del día, autopistas (la AP-7
y la AP-2) restringidas al tráfico y unos 16.000 niños sin colegio.
La avería eléctrica del Priorat se prolongó, según Fecsa Endesa, por las dificultades de acceso con que se encontraron los técnicos al intentar llegar al lugar del problema. «Los caminos estaban impracticables y resultaba imposible llegar hasta los postes dañados», dijo un portavoz.

MARÇÀ, A OSCURAS Y Falset aún tuvo suerte. A dos kilómetros, en Marçà, Maria Dolors Piqué se iba anoche a la cama tras haber pasado todo el día sin luz. «Si supiera los nervios que tengo... Da miedo estar sola en casa con una oscuridad tan cerrada», dijo en conversación telefónica.
No mucho más lejos, en La Bisbal de Falset, el panorama no era mucho más halagüeño. La carretera de acceso al pueblo estaba anoche aún cortada al tráfico, al igual que otras 17 vías del resto de Catalunya. «Estamos sin teléfono y sin luz y, en las condiciones actuales, es difícil que llegue hasta aquí siquiera un grupo electrógeno», se lamentó el alcalde, Lluís Massip. «Es un sentimiento de impotencia tremendo, sobre todo porque la mayoría de vecinos del pueblo son mayores», dijo el edil.
De la situación complicada del Priorat pueden dar fe también la treintena de pasajeros del tren regional que se quedó bloqueado por la nieve, justo a su paso por Marçà. Los ocupantes del convoy fueron evacuados, tras cinco horas sin luz ni calefacción. El AVE entre Madrid y Barcelona sufrió retrasos de entre 20 y 30 minutos.
Si los pronósticos de los meteorólogos se cumplen, como hasta ahora, este va a ser un fin de semana en que mejor será quedarse en casa. Después del episodio de nevadas de los últimos dos días, que han dejado espesores de casi un metro en lugares poco habituados a este fenómeno, ahora llegan las heladas.

BAJO CERO EN LA COSTA La previsión indica que esta noche las temperaturas alcanzarán registros negativos incluso a nivel de la costa. En el Pirineo y zonas del interior, los termómetros rozarán los -15o. En la Costa Brava, el viento soplará a hasta 120 kilómetros por hora. Los pronósticos apuntan a un fuerte oleaje, no solo en el norte de Catalunya, sino también en las Baleares, lo que podría afectar al tráfico marítimo.
Protecció Civil, que mantiene el nivel de emergencia del plan Neucat y que ha activado el Procicat por fuertes vientos y riesgo de aludes en la montaña, recomendó ayer que se eviten los desplazamientos por carretera. «Que la gente no piense que, como no nieva, ya no pasa nada. Al contrario: ahora el peligro es mayor por las placas de hielo que se formarán, sobre todo en la red secundaria», avisó el secretario general de Interior, Joan Boada.
De hecho, ya ayer Maria Dolors Piqué apenas salió de su casa de Mar-çà. Ni para trabajar. «Soy monitora del transporte escolar, acompaño a los escolares a Falset, pero como han suspendido el servicio, no he salido». En total, unos 16.000 escolares catalanes se quedaron ayer sin colegio, bien porque las escuelas no abrieron, bien porque el transporte escolar no pudo circular.
Para los bomberos, el temporal de nieve implicó, hasta las 19.00 horas de ayer, un total de 411 salidas, la mayoría –unas 120– la madrugada del viernes, como consecuencia de las fuertes ráfagas de viento que soplaron en el Maresme.

Fuente: elperiodico.com